El espacio vacío

17.8.09 a las 0:13

Ehem... eh.... cómo decirlo?
Vamos a tratar de ser simples: se murió una parte.
Si, una parte del todo ya no está, se fué.
Se fue, se murió, caput!, sefiní, no more, no more nothing..
Ya no está, no se siente la falta, no se siente siquiera eso que los doctores le dicen... el "miembro fantasma".
Bueno, esa parte, si: no está más.
Se murió.
Se fué y se llevó lo que quedaba; desde su espacio hasta su ausencia.
El espacio, lo concurrido, lo inmediato de la presencia, el ser en sí mismo, la cuyuntura, lo inextrincable de su inner self.
Sus dedos no recorrerán su cara cada mañana para desprender las lagañitas, ni su voz demandará el control remoto los sábados a la tarde para ver otra cosa que no sean los simpsons por telefé (si, es cierto, me sé hasta los diálogos de memoria, pero los quiero ver otra vez :)
Ya no se suspenderá en el aire mientras viajas en el sarmiento ida y vuelta de Merlo a Once, ni te dirá que debes "comprarlos a todos" cada vez que pases por la vereda de Zivals.

Ya no estás.
No volverás.
No creo que te extrañen, tampoco te conocían tanto.
Te fuiste para seguir camino por otro lado, que no es el mío.
Sabés que no te recordaremos; ni ellos ni yo.
Y sé que no te molesta, por eso te vas.
Así que hasta acá llegamos, no?
Fue un placer.
Mmm.. no, no siempre.
Bue, en realidad, muy de vez en cuando...
Que bueno saber que ya no estás más. Que bueno saber que te fuiste. Sí, lejos lejos te fuiste.

Mientras escribo sigo repasando los momentos que vivimos juntos... y sí, es cierto.
Me va a hacer muy bien que te hayas ido.

Un beso. Hasta siempre.

1 Responses to El espacio vacío

  1. El Mostro Says:

    Lamento su tristeza ante la partida.

    Un abrazo.